DENOMINACIÓN OFICIAL
“Seguimi” Gruppo Laico di Promozione umano-cristiana
DENOMINACIÓN HABITUAL
“Sígueme” Grupo Laico de Promoción humano-cristiana
FUNDACIÓN
1965
HISTORIA
La fase pre-fundacional de “Sígueme” se remonta a inicios de los años sesenta, desarrollándose en dos ciudades: Módena y Roma, Italia. En Módena, un consistente grupo de jóvenes y de adultos deseaba vivir un cristianismo radical en diálogo con el estilo y las necesidades de los tiempos modernos. En Roma, después del encuentro con Paola Majocchi (1931-2009), fundadora y primera Presidente, y el Padre Anastasio Gutiérrez (1911-1998), claretiano y jurista, tomó forma la idea de una asociación laical nueva, en sintonía con las orientaciones del Concilio Vaticano II. En 1965, Monseñor Abele Conigli, obispo de Sansepolcro (Arezzo, Italia), concedió la aprobación canónica a “Sígueme” como pía unión. Fiel a su estructura y carisma, “Sígueme” caminaba con los tiempos en un proceso de profundización de la propia identidad, que le exigió cambiar cinco veces sus primeros estatutos conservando el patrimonio institucional. Extendiéndose desde 1967 a otras diócesis italianas, la asociación se difundió gradualmente por todo el mundo. El 19 de marzo de 1984, el Consejo Pontificio para los Laicos decretó el reconocimiento de la Asociación Laical “Sígueme” como asociación internacional de fieles.
IDENTIDAD
“Sígueme” es una asociación laical centrada en el seguimiento de Cristo y en la centralidad de la persona, según un estilo de vida laical que valora las relaciones interpersonales. Su objetivo es la felicidad humano-cristiana de cada persona. Los miembros de “Sígueme” se comprometen a poner en práctica sus cualidades, a asumir las responsabilidades que se derivan del bautismo, a desear y hacer de Cristo el corazón del mundo, a luchar contra la injusticia, a dar confianza al hombre, a valorar la originalidad de la persona, a redescubrir el ADN divino en cada realidad, a conjugar ciencia y fe, a respetar la naturaleza y a vivir con amor y solidaridad hacia los demás. La felicidad humana es una alabanza a Dios y un estímulo para colaborar con Él.
La vida de comunión es la característica fundamental de "Sígueme". La fuerza de la unión con Cristo lleva a sus miembros a confiar en la capacidad de cada uno para superarse, para ser fiel, para un compromiso en primera persona vivido con sentido de solidaridad y responsabilidad.
Para perseguir estos objetivos, se da prioridad a: la vida de fe, expresada también en la oración personal y comunitaria; las relaciones interpersonales maduras en Cristo; la presencia cristiana de los laicos en todos los sectores profesionales y sociales; la formación en la libertad responsable; la colaboración en obras centradas en la promoción de la dignidad humana.
La laicidad es la dimensión de la vida de los miembros de “Sígueme”. Viven en el mundo con una visión optimista de la realidad humana, conscientes de que el hombre es tanto más hombre cuanto más se acerca a Cristo. La “fidelidad a Cristo y al hombre” – el único vínculo deseado en "Sígueme" – se convierte en compromiso y responsabilidad.
ESTRUCTURA
“Sígueme” está abierto a todas las vocaciones, y la pertenencia se articula de las siguientes maneras: miembros comprometidos que viven el celibato organizados en comunidades masculinas y femeninas; cónyuges comprometidos; miembros afiliados que viven el celibato individualmente; miembros agregados, individuos y familias; voluntarios que comparten el espíritu de la asociación y colaboran en sus actividades.
Sin perjuicio de su carácter laico, “Sígueme” admite también a sacerdotes con la función, para algunos de ellos, de asegurar la dirección doctrinal y eclesial de la asociación, así como la formación de los laicos tal como la entiende el Concilio Vaticano II.
La fidelidad al Evangelio y a los consejos evangélicos se funda en un compromiso personal, que no prevé votos sino una opción consciente y radical por Cristo, madurada en lo concreto de la vida cotidiana.
En el clima de autorresponsabilidad y promoción de la persona característico de “Sígueme”, la autoridad tiene un papel subsidiario y de coordinación. Es el garante de la unidad y la organicidad estatutaria para el bien común, al servicio de las personas y sus iniciativas.
El Consejo Central anima y evalúa las iniciativas personales, acogiéndolas y unificándolas en una visión más universal. Está asistido por el Consejo Superior de Garantías Estatutarias, el Consejo de Asuntos Económicos y el Consejo de Educación y Cultura.
OBRAS
A partir de la colaboración recíproca y del deseo de responder a las necesidades del mundo, “Sígueme” ha dado vida a centros e iniciativas específicas para la familia y la vida, para los niños, los adolescentes, los jóvenes y los adultos, para una economía alternativa, el turismo solidario y la cooperación internacional. La actividad de “Sígueme”, que puede ser individual, asociada y colectiva, alcanza los más diversos ámbitos y, a lo largo de los años, ha visto nacer, entre otras cosas, un centro para la tercera edad, una granja, talleres de artesanía; ha organizado exposiciones y ferias para la recaudación de fondos, campos de trabajo, formación en voluntariado y globalidad; ha creado grupos para la adopción a distancia, escuelas para padres, para la educación de la sexualidad y la procreación responsable; ha dado apoyo a los núcleos familiares y a los niños en dificultad, asistencia en los campos de refugiados, apoyo en el ámbito de la salud, la nutrición y las madres que van a dar a luz; ha promovido proyectos de desarrollo agrícola.
PUBLICACIONES
SI VIS, revista trimestral; Seguimi News, revista semestral.
A. Gutiérrez, Cristianos sin descuento, Roma 2001.
P. Majocchi, In cordata, Padova 2005.
R. Mazzieri (ed.), Laici cristiani, testimoni di speranza, Padova 2008.
PÁGINA WEB
https://www.grupposeguimi.org/es/
SEDE CENTRAL
“Seguimi” Gruppo Laico di Promozione umano-cristiana
Via Clemente III, 29
00167 Roma - Italia
Tel. [+39] 06.6277806
E-mail: seguimi.sede@iol.it
