Dublín: Francesco Belletti

Las asociaciones promueven el Evangelio de la Familia

La familia es la primera y más poderosa medicina contra una de las peores "enfermedades" del hombre contemporáneo, pero si permanece sola y cerrada, genera soledad a posteriori
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Ya presidente del Foro italiano de las asociaciones familiares (47 asociaciones, 18 foros regionales compuestos por 564 asociaciones; se estima que un total de cuatro millones de familias están implicadas por un total de 12 millones de personas), el prof. Francesco Belletti habló en el panel sobre "Promover el Evangelio de la Familia: cuál es el papel de las asociaciones familiares hoy en día", yendo directo al corazón de la cuestión: "La familia es la primera y más poderosa medicina contra una de las peores "enfermedades" del hombre contemporáneo, la soledad". Las familias asociadas generan bien común, añadiendo valor al capital social de una comunidad "especialmente en su construcción como sujeto agregado, en asociaciones y redes que se convierten en interlocutores de todos los demás actores sociales y de la comunidad eclesial".

Formidable recurso social, "las familias asociadas pueden así convertirse en sujetos sociales colectivos, que empiezan a tener voz, que se unen para "producir más familia" (servicios, relaciones, experiencias de compartir y autoayuda mutua), pero también para contar más, organizarse, hacer lobbying, presionar, protestar". Una tarea esencial y un desafío pastoral es ayudar a cada familia a encontrar "compañeros de viaje": "una reciente perspectiva de desarrollo es la aparición de nuevas formas de conexión entre familias más pequeñas, más directamente vinculadas a un territorio específico, con relaciones "estrechas" y "cálidas", siempre fuertemente entrelazadas con las necesidades concretas de la vida cotidiana".

Si la cualidad relacional parece contar más que el reconocimiento social, el profesor Belletti se pregunta: "¿cómo involucrar a la gran mayoría de las familias, que permanecen sin conexiones con el exterior? Una primera respuesta se encuentra en las palabras de Amoris laetitia (184): "Con el testimonio, y también con la palabra, las familias hablan de Jesús a los demás, transmiten la fe, despiertan el deseo de Dios, y muestran la belleza del Evangelio y del estilo de vida que nos propone".

24 de agosto de 2018