La importancia de la formación permanente para todos los bautizados

En la segunda jornada de la conferencia "Pastores y fieles laicos llamados a caminar juntos", que se celebra en el Aula Nuova del Sínodo en el Vaticano, el tema central fue la importancia de la formación permanente para acompañar a todos los bautizados en el redescubrimiento de su vocación y carismas, de modo que la corresponsabilidad sea real.  El tema se desarrolló en un diálogo dinámico y profundo entre todos los participantes, precedido de informes y testimonios.

Tras la celebración de la Santa Misa en la Basílica de San Pedro, presidida por el Cardenal José Tolentino de Mendonça, Prefecto del Dicasterio para la Cultura y la Educación, se iniciaron los trabajos con la ponencia del Prof. Hosffman Ospino, que abordó el tema de la jornada desde la perspectiva de los fieles laicos: para una corresponsabilidad eficaz, es necesaria una adecuada formación de los laicos. El card. Gérald Lacroix, Arzobispo de Quebec, ha hablado también de la necesidad de una formación que nos ayude a caminar juntos hacia el Señor, y en particular a «redescubrir el sacerdocio de los bautizados para que todos, católicos, ministros ordenados y miembros de la vida consagrada puedan participar eficazmente en la vida de la Iglesia».

Por ello, el intercambio de experiencias de hoy se ha centrado en las experiencias de formación en los distintos ámbitos pastorales. Shoy Thomas, del movimiento internacional Jesus Youth, habló sobre la formación de los jóvenes: «Si la formación juega un papel importante en el camino pastoral, igualmente importante es el proceso de acompañamiento, la presencia de familias que abren sus casas a los jóvenes, la libertad concedida para cometer errores y aprender de ellos, animándoles y apoyándoles, ofreciéndoles oportunidades». A continuación, Benoît y Véronique Rabourdin, de la Comunidad Emmanuel de Francia, hablaron de la formación como un acto transformador que da impulso misionero a las parejas entre sí y a las familias hacia otras familias. «No hay manera de llegar al corazón de los demás si permanecemos encerrados en nosotros mismos. La formación es también levantar los ojos, saber ver y responder con compasión a tantas necesidades»: así se expresó Andrea Poretti, argentina de la Comunidad de Sant'Egidio, sobre la formación permanente de todos los que trabajan en el campo social. Por último, José Prado Flores, de México, centró su testimonio en la importancia del primer anuncio del misterio de Cristo, Salvador y Señor, para recomenzar en la formación de los bautizados que se han alejado de la Iglesia. Se abrió así un intercambio de experiencias y necesidades pastorales en el ámbito de la formación, expresadas por diversos participantes.

La sesión de la tarde se abrió con la continuación del intercambio de experiencias presentado por el card. Matteo Zuppi. El Presidente de la Conferencia Episcopal Italiana subrayó que debe iniciarse una profunda formación de los pastores para que aprendan a alejarse de una actitud paternalista, porque «todos tenemos algo que aprender de la comunión entre nosotros, laicos y pastores». En lugar de alimentar los contrastes entre clero y laicado, hay que buscar formas mejores y más eficaces de colaboración y corresponsabilidad.

A continuación, el P. Miguel Garrigós Domínguez, de España, y Sônia Gomes de Oliveira, de Brasil, presentaron experiencias de formación sobre proyectos relacionados con la preparación al matrimonio y la experiencia del «Año del laicado» en Brasil.

En un momento final de intercambio y diálogo, Su Exc. Mons. Richard Moth, de la Conferencia Episcopal Inglesa, y Su Exc. Mons. Jean de Dieu Raoelison, de la Conferencia Episcopal de Madagascar, profundizaron en el tema de la formación de los pastores respecto a la relación con los laicos: Mons. Moth ilustrando “Faith in politics”, una experiencia de formación en política para jóvenes; Mons. Raoelison presentando la formación de catequistas para las zonas más pobres del país. En respuesta al deseo de muchos otros de compartir experiencias y preguntas, la Subsecretaria Linda Ghisoni aseguró a los presentes que el diálogo - por parte del Dicasterio - continuará ciertamente en las relaciones ordinarias con las Iglesias particulares, y animó a los presentes a convertirse en agentes de cambio de este intercambio en sus propias realidades locales.

Durante la conferencia, se rezó juntos por las víctimas del terremoto en Siria, al igual que se hizo ayer por las víctimas en Turquía. Por último, una visita a la Capilla Sixtina puso fin a esta segunda jornada de trabajo, que se reanudará mañana, sábado 18 de febrero, con el esperado encuentro con el Santo Padre.