La “Família da Esperança”: cuarenta años sirviendo a los más necesitados

Alrededor de mil personas, pertenecientes a la asociación de fieles Família da Esperança, procedentes de diversos países del mundo, participaron en una peregrinación a Roma y Asís, del 26 de septiembre al 2 de octubre, que incluyó celebraciones, momentos de oración y catequesis en las basílicas papales, las catacumbas romanas y lugares santos vinculados a la historia de San Francisco.

El 40 aniversario de la fundación

La asociación quiso celebrar así el 40 aniversario de su fundación, que comenzó en 1983 en la parroquia de Nossa Senhora da Gloria, en la archidiócesis de Aparecida, por iniciativa del Hermano Hans Stapel, OFM. Su deseo de vivir el Evangelio de forma auténtica y total le llevó a tomar a pecho las situaciones de necesidad que encontraba en su ministerio, y este ideal pronto implicó a otras personas, empezando por Nelson Giovanelli Rosendo dos Santos, un joven feligrés del Hermano Hans, que empezó a acercarse a los jóvenes de la calle del barrio. Así comenzó una vida comunitaria masculina.

La implicación y la generosa dedicación de numerosos laicos pronto llevaron a la apertura de hogares para madres solteras, enfermos de sida y familias sin hogar, y de centros de rehabilitación para jóvenes desfavorecidos y drogadictos. Estos lugares llegaron a conocerse como Fazendas da Esperança, porque en ellos, mediante el encuentro con el Señor y la oración, compartiendo vida y trabajo en los centros, miles de jóvenes se liberaron de las adicciones al alcohol y a las drogas, recuperando así la esperanza de una vida feliz. Más tarde, la dedicación de Lucilene Rosendo e Iraci Leite dio origen, también bajo el cuidado del Hermano Hans Stapel, a la rama femenina de la Comunidad. El Hermano Hans, Nelson, Lucilene e Iraci son considerados los cuatro fundadores de la asociación.

Al servicio de la Iglesia y de todos los que sufren y están excluidos, haciendo así visible la esperanza en el mundo

Las numerosas comunidades (Fazendas da Esperança) en once países diferentes acogen a más de dos mil quinientos jóvenes drogadictos. La asociación también gestiona guarderías para niños, centros de acogida para hombres y mujeres enfermos terminales de VIH y, con el proyecto “Difundir la Esperanza”, involucra a miles de jóvenes que dedican un período de su vida en unas ciento cincuenta ciudades diferentes del mundo donde están presentes las Fazendas da Esperança, entregándose a Dios al servicio de la Iglesia y de todos los que sufren y están excluidos, haciendo así visible la esperanza en el mundo.

Desde hace algunos años, los cuatro fundadores, sin dejar de ser puntos de referencia fundamentales para el carisma, han dejado el gobierno de la asociación, confiado a un nuevo Consejo de Presidencia, encabezado por el sacerdote brasileño Padre José Luis de Menezes, presidente de la Família da Esperança.

Retos y oportunidades de una nueva comunidad que experimenta un cambio generacional de gobierno

Los nuevos responsables invitaron al Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida a participar en algunos de los actos de la peregrinación. Cabe destacar el discurso que la Subsecretaria del Dicasterio, Linda Ghisoni, dirigió a los numerosos miembros de la asociación reunidos en la basílica de San Juan de Letrán el 28 de septiembre. En consonancia con la nueva etapa que atraviesa la Asociación, el discurso puso de relieve los retos y las oportunidades de una nueva comunidad que experimenta un cambio generacional de gobierno. Reproducimos el texto junto con el discurso que el Santo Padre pronunció al día siguiente, viernes 29 de septiembre, durante la audiencia concedida a la Família da Esperança en el patio de San Dámaso del Vaticano.