Los jóvenes del IYAB se reúnen con el Santo Padre

Estos últimos días, al final de su última reunión después de cuatro años de actividad, los miembros del International Youth Advisory Body (IYAB) saludaron al Santo Padre en un encuentro informal, lleno de alegría y emoción. Acompañados por el Secretario del Dicasterio, Dr. Gleison De Paula Souza, y por el responsable del sector jóvenes, P. Joao Chagas, los jóvenes fueron recibidos en la Casa Santa Marta.

Mantener viva la llama del Sínodo de los Jóvenes y hacer crecer el deseo de sinodalidad

El Santo Padre, tras saludar individualmente a cada joven, destacó inmediatamente la alegría y el entusiasmo que los miembros del Organismo han mantenido durante sus cuatro años de mandato, con dedicación y espíritu de servicio.

Expresó un gran agradecimiento por el servicio que los jóvenes consultores han ofrecido en una época marcada por pandemias, nuevos conflictos y numerosos desafíos globales. Durante la reunión, se hizo hincapié en que el organismo había hecho posible que la llama del Sínodo de los Jóvenes permaneciera encendida, desempeñando un papel crucial a la hora de fomentar el deseo de un espíritu más profundo de sinodalidad «La Iglesia necesita su entusiasmo, sus intuiciones, su fe. ¡Nos hacen falta! Y cuando lleguen donde nosotros todavía no hemos llegado, tengan paciencia para esperarnos» (ChV, 299).

El servicio prestado por los miembros consultores ha dado sus frutos no sólo dentro del Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida, sino que también se han convertido en un valioso recurso en la Curia romana, en los territorios y diócesis a los que pertenecen.

Alentados a permanecer unidos a Jesús y a ser misericordiosos con los demás

Los jóvenes del IYAB fueron animados, por tanto, a perseverar en su servicio al Reino de Dios y en su testimonio del Evangelio, y a permanecer unidos a Jesús como los sarmientos a la vid (Jn 15), porque caminar juntos requiere mucha paciencia, ser compasivos y misericordiosos unos con otros, y tener paciencia con los que no caminan al mismo paso.

Por último, los jóvenes del Organismo regalaron al Papa un cuadro realizado por ellos, inspirado en el “Soneto” de Francisco Luis Bernárdez, citado en Christus Vivit: «Porque después de todo he comprendido que lo que el árbol tiene de florido vive de lo que tiene sepultado» (cf. ChV, 108). El cuadro representa un árbol en cuyas ramas cada joven ha impreso sus huellas y su nombre.

Los jóvenes -es el mensaje del cuadro- tienen una misión: crecer paso a paso, sin olvidar nunca sus raíces, y servir a los demás para “dar mucho fruto”.

Esta es la contribución que el IYAB ha aportado a la Iglesia en estos años de servicio: construir la fraternidad y una Iglesia sinodal enraizada en Cristo vivo.

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El Organismo Consultivo, formado por jóvenes de veinte países diferentes, se creó como resultado del Sínodo de los Jóvenes de 2018, con el objetivo de apoyar el trabajo del Departamento Jóvenes del Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida y ayudarle en sus reflexiones sobre los jóvenes.