Los obispos polacos publican un documento con indicaciones pastorales a la luz de “Amoris Laetitia”

En el transcurso de su última reunión plenaria, el episcopado polaco adoptó las “Indicaciones pastorales a la luz de la Exhortación apostólica Amoris Laetitia”.

El documento - leemos en una nota de prensa difundida por el episcopado - "está dividido en cuatro capítulos. En el primero se exponen los puntos más destacados de la enseñanza del Papa Francisco desde la perspectiva de la doctrina de sus predecesores"; en el segundo, "La alegría del amor en el matrimonio y en la familia", los prelados recuerdan "la riqueza de las experiencias de la Iglesia en Polonia en el ámbito pastoral de los novios, de los esposos y de las familias".

El tercer capítulo contiene "nuevas ideas para el servicio pastoral de las parejas, de los esposos y de las personas en situaciones difíciles e irregulares". El texto dice: "En la pastoral de los novios, debemos ayudar a los jóvenes a descubrir los valores y la riqueza del matrimonio. Es necesario recordar la importancia de las virtudes, especialmente la de la castidad, que es la condición para un auténtico crecimiento del amor conyugal". El cuarto capítulo se titula "La invitación al discernimiento pastoral; la lógica de la integración a la luz del Capítulo VIII de la Exhortación Apostólica Amoris Laetitia".

En las conclusiones, los obispos señalan la necesidad de elaborar un nuevo Directorio de Pastoral de las Familias para la Iglesia en Polonia, "sobre cuya base será posible preparar instrucciones de aplicación diocesanas o metropolitanas y establecer centros de servicio para el matrimonio y la familia". Al mismo tiempo -añaden- será necesario elaborar el programa y definir las formas de preparación de los ministros ordenados idóneos para emprender el camino de acompañamiento de los fieles y el proceso de discernimiento de las situaciones en las que se encuentran concretamente. El servicio pastoral debe caracterizarse por la cercanía, por una mirada respetuosa y llena de compasión, pero al mismo tiempo sana, libre y estimulante para madurar en la vida cristiana".