Los jóvenes, artífices de la paz con valentía. Desde los Balcanes, un llamamiento a los valores compartidos de la vida por la paz

Muy sensibles a la grave situación de conflicto que vive Europa oriental y conscientes de la fragilidad de la paz, también en los países balcánicos, los obispos de la Conferencia Episcopal Eslovena han organizado, también este año, un encuentro interreligioso, es decir, un Foro por la Paz, en los Balcanes, el 14 de junio de 2025 en Capodistria. El tema del foro fue «Valores compartidos de vida para la paz». En 2023, el secretario de Estado, S. Em. el card. Pietro Parolin, participó en el Foro como delegado especial del Santo Padre.

Los valores de la vida, como el amor, la justicia, la solidaridad y la dignidad, necesitan la paz para desarrollarse

En esta edición del Foro participó el secretario del Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida, Dr. Gleison De Paula Souza, quien intervino sobre el tema «El papel de la juventud balcánica como actor de paz». Partiendo de la idea de que «los Balcanes, por su centralidad geográfica en el continente europeo y su extraordinaria complejidad étnica, lingüística y religiosa, no son solo una encrucijada de culturas, sino un laboratorio: un laboratorio viviente donde la valorización de la diversidad representa un gran desafío y una gran riqueza», el secretario quiso invitar a los participantes a reflexionar sobre la urgencia de que «los valores de la vida, como el amor, la justicia, la solidaridad y la dignidad, necesitan la paz para desarrollarse». Como nos recuerda el Santo Padre León XIV, «una paz desarmada y desarmante, humilde y perseverante» es necesaria «para promover al ser humano en su pleno y armonioso desarrollo, valorando los progresos y señalando las derivas que lo obstaculizan a nivel cultural y social».

La paz para caminar hacia el bien común

«En este escenario», continuó De Paula Souza, «los jóvenes están llamados a una tarea audaz: construir la amistad social, superar las divisiones históricas y culturales y convertirse en artífices de la paz. Esto significa caminar hacia algo grande: el bien común. Los jóvenes, de hecho, no son espectadores de la historia, sino protagonistas. No están llamados a sufrir el mundo que les ha sido legado, sino a transformarlo. Y el primer paso para convertirse en actores de paz es elegir el diálogo».

Jóvenes protagonistas valientes para promover, con pasión y responsabilidad, la paz

El llamamiento a los jóvenes de los Balcanes a ser artífices de la paz, con valentía y protagonismo, es válido para todos, y el secretario recordó la experiencia de las Jornadas Mundiales de la Juventud que el Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida tiene el honor de organizar: «estas citas internacionales de la Iglesia católica son un testimonio vivo y tangible de la capacidad que tienen los jóvenes para crear espacios de oración, diálogo y compartir que llevan a superar todas las barreras culturales, lingüísticas y sociales. El tema del próximo encuentro en Seúl en 2027 recordará el tema del coraje. Concluyo, por tanto, con la invitación a ser, como los jóvenes, artífices de la paz, con valentía, sin miedo a entrar en relación con el otro, a crear entornos humanos y digitales que se conviertan en espacios de encuentro y valorización de la diversidad. Si lo hacemos juntos con los jóvenes de los Balcanes y del mundo, entonces podremos vivir verdaderamente los valores comunes de la vida y promover, con pasión y responsabilidad, la paz».

Foro para la paz en los Balcanes: un laboratorio para valorar la diversidad

El Foro de este año estuvo abierto a la participación de los líderes de las diversas religiones presentes en los países balcánicos: Albania, Bosnia-Herzegovina, Bulgaria, Croacia, Grecia, Kosovo, Macedonia del Norte, Montenegro, Rumanía, Serbia, Turquía y, por supuesto, Eslovenia. Se reunieron los presidentes de las conferencias episcopales católicas, patriarcas o metropolitanos de las Iglesias ortodoxas (Constantinopla, Belgrado, Bucarest, Atenas, etc.) y muftíes musulmanes, así como algunos representantes de otras comunidades religiosas presentes en estos países. También estuvieron presentes representantes de los países vecinos, Austria, Italia y Hungría, y jóvenes de todos los países invitados. El Foro se celebró el sábado 14 de junio y se articuló en dos sesiones: una mesa redonda para un debate entre eminentes líderes religiosos, seguida de breves intervenciones de los distintos ponentes. Paralelamente, se celebró un taller de ideas especialmente dedicado a los jóvenes, que pudieron compartir libremente sus reflexiones.

Una oración común por la paz puso fin al evento.